7.11.09

Indudablemente.

Y no soy el juez. Ni el árbitro.
Y hay cosas que no puedo aceptar porque simplemente me disgustan.
Y cuando una cortina de humo se filtra en mis ojos hasta hacerlos arder, pienso que mi única inquietud debería ser darte una vida.

Y no se lo puedo relatar a mi hipnotizador.
Y no puedo acercarme porque estoy envuelta en plástico.
Y puede que algún día quiera tener hijos, pero su padre queda más allá de toda nube mientras la distancia que nos separa sólo está en mi mente.

Hasta ahora las cosas han ido bien, temporalmente.
Eres mono, pero las circunstancias han cambiado.
Tu método de sustitución es tu apoyo, tu entera protección para el dolor.
Esta presentación de mis artimañas va a cambiar a mi chico de celofán.

Y quiero ser tu hábito, tu puerto y tu refugio.

No hay comentarios: